Los carnavales en Brasil han servido de plataforma para expresar el rechazo con políticas neoliberales, como la reforma laboral, del presidente de facto Michel Temer.
Con llamativos disfraces y otras atracciones, los brasileños intentan llamar la atención contra políticas que, según denuncian, han perjudicado los derechos alcanzados durante los gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT), encabezados por Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.
En un recorrido por los barrios brasileños se pueden observar pequeñas comparsas que no se comparan con la majestuosidad de las celebraciones preparadas en las grandes ciudades.
Los brasileños temen que las nuevas medidas implementadas impacten en la celebración, considerada una de las más importantes del país suramericano.
>> Unas 30 mil escuelas rurales de Brasil cerraron sus puertas
También la población afrodescendiente marchó en Brasil en la defensa de la demarcación de territorios quilombolas.