Bolivia introdujo la exigencia de visado para los ciudadanos de Israel, tras la medida adoptada en julio cuando el presidente Evo Morales anunció "la firme decisión de denunciar el acuerdo sobre visas con Israel del 17 de agosto de 1972", firmado durante una dictadura militar boliviana.
Bolivia puso además a Israel en una categoría de país terrorista, en protesta por los ataques en la Franja de Gaza que cobraron más de dos mil muertos palestinos, la mayoría civiles.
Morales había presentado además una solicitud al Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU para la consideración de una demanda contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por "delitos de lesa humanidad" contra el pueblo palestino.