Este domingo se conmemoran 60 años de la muerte de Eugen Bertolt Friedrich Brecht, mejor conocido como Bertolt Brecht y considerado el padre del teatro épico.
“El artista debe ser un testigo, un catalizador, un difusor y transformador de los grandes cambios y denunciar las grandes injusticias sociales”.
Desde muy joven se interesó por las realidades de las clases sociales con menos recursos y se opuso a la forma de vida de las familias de esa época. Se alejó de los lujos para desarrollar una personalidad más profunda.
Se identificó con el marxismo y por medio de un amplio contenido político en sus obras buscó gestar un cambio social a través de la educación.
La mayoría de sus piezas literarias fueron censuradas debido a sus críticas a la clase media alemana y por la represión nazi que imperaba en ese momento. Su obra se caracterizó por el alejamiento reflexivo y la observación crítica.
¿Qué nos dejó Bertolt Brecht?
El legado de Brecht es amplio y dentro de su obra destacan piezas teatrales y poemas. Siempre mantuvo una posición crítica y contestataria contra toda clase de injusticia.
Brecht cuestionó la moralidad y la ética de la guerra, y evidenció a los mercaderes su producción artística sigue tan vigente como en la época en la que las escribió.
En su labor teatral invitaba a la reflexión y animaba al público a asumir una actitud política frente a los hechos históricos y sociales de su época. Su forma de hacer teatro fue calificada como épica porque visualizaba al artista como la conciencia de la realidad.
Las temáticas abordadas en la obra del dramaturgo alemán continúan vigentes, e invitan a la reflexión y a la denuncia social.
Frases célebres
"Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles".
"El arte no es un espejo para reflejar la realidad, sino un martillo para darle forma".
"El arte, cuando es bueno, es siempre entretenimiento".
“Al río que todo lo arranca lo llaman violento, pero nadie llama violento al lecho que lo oprime”.