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Parlamentarios de la izquierda del país han anunciado que exigirán al fiscal general del Estado que inicie una investigación sobre un posible conflicto de intereses en el acuerdo de explotación del yacimiento de gas impulsado por el Gobierno de Netanyahu.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se encuentra envuelto en una álgida polémica luego que el pasado lues 8 de enero, se revelara la grabación de un audio en el que su hijo, Yair Netanyahu (26 años) conversa con sus amigos, afirmando saber dónde obtener servicios de prostitutas, además de comprometer a su padre dando a conocer de un aparente caso de abuso de poder.
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"Mi padre consiguió un arreglo de 20.000 millones de dólares para tu padre, ¿y tú te peleas conmigo por 400 shekels?", le dice Yair Netanyahu al hijo del actor Kobi Maimon.
La grabación, realizada en 2015, es coincidente a la fecha en la que el millonario actor israelí Kobi Maimon acababa de hacerse con una concesión para explotar gas en un yacimiento del mar Mediterráneo, en las costas de Israel.
Reacciones
Al respecto, varios parlamentarios de la izquierda del país han anunciado que exigirán al fiscal general del Estado que inicie una investigación sobre un posible conflicto de intereses en el acuerdo de explotación del yacimiento de gas impulsado por el Gobierno de Netanyahu, luego de ver en las palabras de su hijo, un caso de corrupción.
Por su parte, el primer ministro israelí declaró ante la prensa que los que pagaron 60.000 shekels (unos 17.500 dólares) para adquirir la grabación "han cruzado la línea roja" y agregó que las autoridades deberían investigar el asunto.
En Israel, realizar grabaciones secretas, sin el consentimiento de algunas de las personas implicadas, es un delito punible con hasta 5 años de prisión. La ministra de Justicia, Ayelet Shaked, adelantó que el Gobierno podría aprobar una enmienda legislativa que prohibiría totalmente las grabaciones secretas.
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Los otros casos de los Netanyahu
En estos momentos, la familia Netanyahu ya se encuentra envuelta en tres investigaciones criminales. La primera, conocida ampliamente como el "Caso 1000", se centra en los supuestos regalos recibidos por parte de donantes millonarios, particularmente los puros y el champán del productor de Hollywood Arnon Milchan, valorados en más de 20.000 euros.
La segunda, llamada por los medios "Caso 2000", gira alrededor de una supuesta negociación entre Benjamín Netanyahu y Arnon Mozes, editor y propietario del diario israelí Yediot Ajaronot. Según la acusación, el primer ministro habría prometido al periodista reducir la circulación de su principal competidor, el rotativo gratuito Israel Hayom, a cambio de una cobertura más positiva de su gestión.
Por último, Netanyahu figura como testigo en el llamado "Caso 3000". Se trata de la decisión israelí de comprar submarinos a Alemania -una compra con indicios de abuso de poder- que afecta a altos cargos políticos, entre ellos varios colaboradores del primer ministro.
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El punto más polémico de la conversación es el siguiente:
Netanyahu: Mi padre consiguió un buen negocio para tu padre. Debes ser amable conmigo. Hermano, mi papá le dio un buen trato a tu padre, luchó por eso en la Knéset, hermano.
Maimon: ¿Qué?
Netanyahu: Mi padre realmente luchó por eso, lo recuerdo.
Abramov: Nos debes 125 mil.
Netanyahu: Hermano, mi papá acaba de conseguirle al tuyo un trato de 20 mil millones de dólares ¿y no puedes pagarme 400 shekels?
Maimon: ¿Estamos hablando de Sheshinski? (jefe de comisión de regalías de gas natural)
Netanyahu: Estás llorando por 400 shekels, mi padre arregló 20 mil millones de dólares para tu padre y estás llorando por 400 shekels, hijo de puta.
Abramov: No quiero que esta conversación salga, que Dios nos ayude.
Escúchala completa (en hebreo) aquí
