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El jovén Ali Mohammed al-Nimr será ejecutado por las autoridades saudíes por medio de la crucifixión tras ser rechazada su apelación final en las corte del país árabe.
Al-Nimr fue detenido el 14 de febrero 2012, cuando tenía solo 17 años, durante las protestas contra las autoridades en la provincia chiita de Qatif, en el oeste del país.
El Gobierno lo acusó de posesión ilícita de armas de fuego, a pesar de no haber evidencias que justificaran el último cargo que pesaba sobre él, esto según lo reseñado por el medio IBTimes.
El jóven saudí es sobrino un líder religioso y destacado activista de los derechos humanos, Sheikh Nimr al-Nimr, quien fue condenado a muerte en 2014. Activistas de derechos humanos han señalado que este hecho podría estar vinculado al destino que correrá el joven, destacó 'The Washington Times'.
Los pasos del juicio no se ajustaron a las normas del derecho internacional, destacan varias organizaciones que siguieron la causa contra Ali Mohammed al-Nimr. Se conoció que el joven fue torturado y forzado a firmar una confesión en 2012; dos años después, en mayo de 2014, fue condenado a muerte.
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Maya Foa, de la organización de derechos humanos Reprieve, afirmó que nadie debería sufrir el calvario por el que Ali pasó: tortura, confesión forzosa, y un proceso de juicio injusto y en secreto, lo que ha culminado en una sentencia de muerte por crucifixión".
Ali Mohammed al-Nimr podría ser ejecutado en cualquier momento sin que se le notifique a su familia.
