PEPSICO

Aserrín aserrán

los maderos de san juan 

piden pan no les dan 

piden huesos y les dan queso 

piden vino y si les dan

se marean y se van

una versión actualizada

Aserrín aserrán

los obreros de san juan (de todo el país)

piden pan no les dan

piden queso les dan hueso

y les rompen el pescuezo

“Sabemos por experiencia que la barbarie, siempre latente, se conjuga de maravillas con la mansedumbre de esas mayorías que saben incorporar el horror a la frivolidad del ambiente”.

“El horror económico” Viviane Forrester

Si alguna enseñanza nos puede dejar este horroroso espectáculo que Vidal nos ofrece con la bestial represión a los pacíficos y desarmados obreros de Pepsico es que hay que resistir, sabiendo que en cada resistencia aletea la esperanza de un avance del pueblo y un retroceso del neoliberalismo.

Si ante cada atropello, la actitud del pueblo fuese de resignación y mansedumbre, volveríamos en un santiamén a la época del esclavismo. Si ante cada amague, ante cada amenaza, ante cada brabuconada, en lugar de resistir y de esa manera poner en evidencia el carácter antidemocrático de los “amenazadores”, nos resignáramos como pueblo en lugar de resistir, el destino final de nuestros esfuerzos, de nuestras luchas, sería el fracaso estratégico.

La derrota de la última y mas sangrienta dictadura eclesiástica-cívica-militar que padecimos, está sustentada de miles de “derrotas” tácticas como esta de hoy, la que sufren los hermanos trabajadores de Pepsico, pero sin ellas, no hubiéramos podido reconquistar la “democracia”, esta democracia tuerta, chueca, llena de deficiencias que aun así, debemos defender y consolidar, para ensanchar sus horizontes y profundizar su esencia, su contenido.

Si simplemente nos ganaran la parada con una simple amenaza y no ofreciéramos resistencia, no tendríamos futuro.

¡HONOR A LA ERÓICA RESISTENCIA DE LAS/OS OBRERAS/OS QUE EN TODO EL PAÍS Y LA REGIÓN, ESTÁN DEFENDIENDO CON EL CUERPO, EL DERECHO AL TRABAJO, A UNA VIDA DIGNA, A LA CONVIVENCIA PACÍFICA Y DEMOCRÁTICA!!!!!!

Miguel Ángel Espínola

La Plata julio 13 de 2017