Los datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza revelan que las detenciones de inmigrantes durante marzo alcanzaron su mayor nivel en 20 años.
Estados Unidos marcó en el mes de marzo un récord de llegada de migrantes menores de edad solos, al reportarse la detención de 18.890 jóvenes, niños y niñas.
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De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), el número de pequeños retenidos en marzo dobla el total de febrero, cuando esa agencia detuvo 9.271 menores de edad.
Los datos de la CBP confirman que el sistema de procesamiento de la Patrulla Fronteriza se encuentra en medio de una crisis agravada por la pandemia del coronavirus.
Esta situación ha sido advertida por el Gobierno y las organizaciones proinmigrantes, y que apenas es comparable con la que afrontó su antecesor Donald Trump.
We continue to see an increase in monthly illegal migration along our Southwest border. We're committed to balancing the need to maintain border security, care for those in our custody, and keep the American people & our workforce safe. https://t.co/CRyVDXi8tz
— CBP Troy Miller (@CBPTroyMiller) April 8, 2021
Los números del organismo estadounidense revelan que las detenciones de inmigrantes indocumentados durante el mes de marzo en la frontera con México alcanzaron su mayor nivel mensual en 20 años.
El mes pasado, los agentes fronterizos interceptaron a 172.331 indocumentados, un aumento del 70.6 por ciento respecto al total de 101.028 de febrero de este año, según los datos actualizados por la CBP.
CBP has had over 569,800 encounters this fiscal year along the Southwest border, including over 172,000 encounters in March.
— CBP (@CBP) April 8, 2021
To see a breakdown of Southwest Land Border Encounters by U.S. Border Patrol (USBP) & Office of Field Operations (OFO), visit: https://t.co/QlnTfIo0Ha pic.twitter.com/ndxmVLOnM5
De los más de 172.000 inmigrantes interceptados en marzo, 168.195 fueron capturados por la CBP, mientras que otros 4.136 llegaron a las garitas de ingreso de la frontera, donde en muchos casos son declarados “inadmisibles”.
Las cifras de detenciones son un récord inédito en dos décadas, sumado al máximo histórico en la llegada de menores solos, aumenta la presión sobre el Gobierno de Biden.
A pesar de las alarmantes cifras, la administración de Joe Biden prefiere no hablar de crisis en un momento en el que enfrenta la presión de organizaciones de ayuda a inmigrantes y de dirigentes republicanos que cuestionan la política del líder demócrata.