Las condiciones que generaron el Caracazo fueron las que permitieron el inicio de la Revolución Bolivariana en Venezuela, y los parámetros de vida de hoy en ese país son totalmente opuestas a la crisis vivida en 1989. Actualmente, la derecha venezolana pretende sugerir un escenario socio económico similar al que originó El Caracazo un 27 de febrero de 1989. Pero la cara visible de las protestas de hoy está integrada por jóvenes de clases pudientes mientras que en los barrios más pobres se respira tranquilidad. Lo cierto es que la realidad social dista mucho de parecerse a la de hace 25 años.

A finales de julio, la noticia de un saqueo en el estado Bolívar (al sureste de Venezuela) acaparó las redes sociales y los medios de comunicación tanto nacionales como los internacionales.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, repudió los hechos violentos que se desarrollaron en la localidad de San Félix, en el edo. Bolívar, que dejaron saldo de una persona asesinada y otras 60 detenidas en referencia a una serie de saqueos que se registraron en esa entidad.

Maduro advirtió que estas acciones forman parte de los planes de desestabilización creados desde el exterior con intenciones de debilitar la institucionalidad.

En una Venezuela sumida en campaña electoral para renovar a los 165 diputados a la Asamblea Nacional el próximo 6 de diciembre, los actos que levanten campañas y generen votos cobran sentido, sobre todo cuando sectores de la oposición afirman que en esta oportunidad sí ganarán la mayoría en los comicios pese a que han sido derrotados en las 19 elecciones anteriores.

Maduro le dijo a la derecha “ustedes que reciben órdenes de generales norteamericanos para hacerle daño a su país (…)  llueva, truene o relampaguee en Venezuela hay elecciones el 6 de diciembre y la revolución obtendrá una nueva victoria popular”.

No obstante, estos eventos continuaron. La primera semana de agosto funcionarios policiales y de la Guardia Nacional consiguieron frustrar el segundo intento de saqueo, a una sucursal de mercados Makro, en el estado Carabobo (centro) y otro a un supermercado en el estado Zulia (occidente).

Agencias de noticias internacionales, abiertamente opositoras al gobierno venezolano,  prepararon titulares como:

Posteriormente, la cadena de televisión estadounidense  CNN rectificó como un “error humano” la difusión de información falsa sobre supuestos saqueos ensobre supuestos saqueos en la ciudad de Maracay, en el estado Aragua (centro). “Fue un error que tenemos que reconocer”.

El Ministerio para la Comunicación y la Información de Venezuela  emitió un comunicado en el que califica las mentiras de CNN como una “campaña orquestada, criminal, terrorista para engañar e incitar a la violencia”.

Mientras que el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, también alertó a la población de cómo la oposición solo habla de saqueo, olvidándose de sus viejos argumentos como el desabastecimiento, colas, “presos políticos”, o aumentos salariales, “la moda es saqueo, esa es la palabra que tienen”.

La oposición, por su parte, defiende el planteamiento de que el país vive un escenario igual al del estallido social ocurrido en la capital en 1989, “El Caracazo”. Pero ¿es cierto que los venezolanos viven un escenario similar?

¿Por qué no un Caracazo? 

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En 1989, las protestas fueron producto de la crítica situación económica del país, la escasez de alimentos debido a las medidas implementadas por el entonces presidente Carlos Andrés Pérez, los escándalos de corrupción y la represión a la protesta.

Conozca a continuación por qué el “nuevo Caracazo” que busca la oposición no está justificado.

En primer lugar, las condiciones económicas de 1989 nada tienen que ver con las actuales, pues los venezolanos no podían acceder a los productos de primera necesidad ni siquiera haciendo las colas, dado el alto costo de los alimentos. Casi el 80 por ciento de la población vivía en condición de pobreza, muchas personas en situación en calle y más de 3 mil personas fueron a parar a fosas comunes por el simple hecho de protestar contra las medidas neoliberales.

ANÁLISIS:  Venezuela: Precios justos Vs Guerra económica

Datos económicos de Venezuela:

- 36.2% de inversión social en las gestiones anteriores al Gobierno bolivariano. Hoy, esa cifra asciende al 64.1%

- A finales de los 80’ la pobreza general se ubicaba en 69%, en la actualidad se ubica en 27,4%

- En 1989, la pobreza extrema era de 20%,  en la actualidad se encuentra en 4.5% 

- En 2013, la FAO reconoció a Venezuela por reducir la subnutrición que entre 1990 y 1992 era de 13.5% y hoy es del 5%

- La Unión de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ubicó a Venezuela como el quinto país del mundo con mayor matrícula estudiantil universitaria

- La cifra de pensionados pasó de 234 mil 300 adultos mayores en 1999 a 2 millones 565 mil 725 en 2014, con un incremento de 300 mil más en 2015

- La inflación era del 81%, actualmente se ubica alrededor del 60% producto de la guerra económica

- El Índice de Desarrollo Humano (IDC) en 1990 era de nivel 0.644 y en 2012 era nivel alto 0.764

- Carlos Andrés Pérez aumentó los precios de las cuotas hipotecarias. En cambio, Hugo Chávez incrementó los recursos para la adquisición de viviendas. Hasta el momento, la Revolución Bolivariana ha construido un total de 725 mil viviendas dignas que pueden ser adquiridas sin cuota inicial para personas que perciben salario mínimo.

- El desempleo en mayo de 2015 se ubicó en 6,6%,  la tasa más baja desde 1999.

¿Cómo era la Venezuela en la década de 1980?

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- En 1983 el precio del barril del petróleo se había reducido a 26 dólares pese a que en 1979 costó 40.

- El 18 de febrero de 1983, conocido como el Viernes Negro se suspendió la libre compra y venta de divisas y el bolívar se devaluó pasando de 4.30 a 7.50. La especulación cambiaria aún persiste.

- Entre 1983 y 1989 el bolívar se devaluó 13.000% con respecto al dólar.

- La deuda externa era de más de 30 mil millones de dólares y la inflación se ubicó en 80%.

VIDEO:  Imposible comparar Caracazo con la realidad actual del país

- Las reservas del Banco Central de Venezuela pasaron de 10.251 millones de dólares en diciembre de 1985 a 3.092 millones de dólares en 1988.

- En 1989, el 47.5% de la población se encontraba en pobreza crítica, es decir, debajo de los niveles de subsistencia.

- La escasez de alimentos obligó a consumir alimento para mascotas, como varios titulares de la prensa escrita registraron.

- El 2 de febrero de 1989, Carlos Andrés Pérez, presenta un “Paquete Económico”, conocido como “Paquetazo”

 

La Venezuela de hoy

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- El precio del barril de petróleo al 14 de agosto es de 41,40 dólares (se debe considerar, la caída mundial de los precios del barril, la sobreoferta reinante en el mercado y desenvolvimiento de la economía de China)

- Venezuela posee actualmente un control cambiario para combatir la precipitada salida de capitales y de movimientos especulativos.

- El salario mínimo en Venezuela fue aumentado en 2014 en un 30 por ciento y actualmente se ubica en 7.421,66 bolívares más el bono de alimentación entre 2.250 y 3.375 bolívares mensuales. La Revolución Bolivariana suma desde su inicio, en 1999, un total de 29 aumentos del salario mínimo.

- En logros educativos, destacan los 77 millones de textos escolares entregados a niños, niñas y adolescentes y la entrega de más de 2 millones de computadoras Canaima, proyecto que recibió el reconocimiento de la Unesco.

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- El Gobierno Nacional ofrece el beneficio de alimentación escolar a más de 4 millones de niños en las escuelas públicas.

- La FAO constató que cinco millones de venezolanos reciben del gobierno algún tipo de ayuda a través de meriendas o comidas gratuitas, y otros 14 millones acceden a alimentos a precios económicos a través de programas oficiales.

- Misión Milagro (ALBA) ha devuelto la vista a 3 millones 482 mil 361 personas en sus diez años de funcionamiento.

- Durante los últimos 15 años, se ha registrado un incremento de más del mil 500 por ciento en inversión de salud. Se han construido más de 13 mil 749 centros de salud públicos.

Por estas razones no es comparable la actual guerra económica que dirigen los poderes económicos y políticos de oposición, junto al bachaqueo, a las condiciones sociales, políticas y económicas que produjeron el Caracazo.