El presidente de Uruguay, José Mujica, instó a los países a solidarizarse con los prisioneros de Guantánamo y tomar el ejemplo de otras cuatro naciones que albergarán reos como refugiados.
Uruguay acoge a seis prisioneros de la ilegal Base Naval de Guantánamo, que mantiene abierta el gobierno de Estados Unidos en territorio cubano, como parte de los compromisos adquiridos por Mujica tras su última reunión con el presidente Barack Obama en marzo de 2014.
El domingo pasado llegaron a Montevideo (capital uruguaya) cuatro sirios, un tunecino y un palestino, quienes se encontraban prisioneros en la cárcel ilegal. Estos seis reclusos fueron detenidos por falsas acusaciones de pertenecer a grupos de Al-Qaeda, y nunca presentaron cargos en su contra.
Su libertad estaba autorizada, peor no pudieron devolverse a sus naciones de origen por razones judiciales y habían permanecido en prisión, mientras Washington negociaba con un país que los aceptara.Ya radicados en Uruguay como refugiados, ingresaron al Hospital Militar donde se sometieron a un chequeo médico para instalarse temporalmente y hasta que "normalicen su situación" en una vivienda facilitada por el sindicato de Propaganda y Relaciones Internacionales de PIT CNT.
"Creemos que en dos o tres meses estarán en condiciones de poder moverse solos por el país, estar adaptados y andar tranquilamente",informó el secretario de PIT CNT, Gabriel Molina a los medios locales este jueves luego de que los prisioneros salieron del hospital.
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El dignatario uruguayo se reunirá con los refugiados y sus representantes, una vez que reanude sus funciones, tras participar en la Cumbre Iberoamericana realizada en Veracruz, México.
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Los refugiados que decidan quedarse en el país tendrán que trabajar y adaptarse “Y si les aparece algún familiar armarán su familia aquí y tendrán hijos”, añadió.