Una investigación revelada este lunes por la organización social “Los marginados más jóvenes de Estados Unidos”, confirma que uno de cada 30 niños que reside en ese país no tiene hogar.
De acuerdo al trabajo publicado por el Centro Nacional de Familias Desamparadas de EE.UU. esa realidad es el resultado de la creciente pobreza que enfrentan los estadounidenses y las pocas posibilidades de adquirir una vivienda a precio justo.
Otro factor que incide en el crecimiento del problema, es la violencia doméstica que muchas veces obliga a las madres a emigrar de sus hogares por temor a que sus hijos sean agredidos.
Para la responsable de la investigación, Carmela DeCandia, la falta de vivienda entre los niños ha alcanzado proporciones epidémicas. “Hay niños sin casa en cada ciudad, condado y estado, en cada rincón del país”, sostuvo.
“Vivir en refugios, sótanos de vecinos y sitios peores hace que los niños sin hogar sean las personas más invisibles de nuestra sociedad”, DeCandia.
Lamentó que hasta la fecha el Gobierno no haya sumado mayores esfuerzos para erradicar el mal que afecta de manera directa a muchos hombres y mujeres del mañana.
“No se ha dirigido el mismo nivel de atención y recursos a ayudar a las familias y a los niños. Como sociedad, vamos a pagar un alto precio en términos humanos y económicos”, añadió.