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El presidente provisional de Brasil, Michel Temer, reinstalará el ministerio de Cultura tras una ola de protestas generadas en los últimos días, luego de haberle retirado el rango ministerial como su primera medida luego de que la mandataria Dilma Rousseff fuera apartada de su cargo.
La eliminación de la cartera generó el descontento de los artistas brasileños, entre ellos Caetano Veloso y el actor Wagner Moura, quienes se movilizaron en al menos 18 ciudades del país suramericano para rechazar la acción de Temer.
Movilizaciones populares en #Brasil hacen a @MichelTemer recrear Ministerio de Cultura #OcupaMinC #ForaTemer pic.twitter.com/KztP90tcNW
— Adriana Robreño (@AdrianateleSUR) 21 de mayo de 2016
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De acuerdo con el actual ministro de Educación, Mendonça Filho, la decisión de reintegración será formalizada la semana próxima y declaró que se trata de “un gesto del presidente Temer en el sentido de serenar los ánimos y enfocarse en un objetivo mayor: la cultura brasileña”.
Asimismo informó que frente al ministerio de Cultura estará Marcelo Calero, quien fue nombrado por Temer secretario de Estado de Cultura cuando decidió que la cartera de educación y cultura se fusionaran.
Los artistas brasileños han protagonizado numerosas protestas en los últimos días en rechazo a la supresión de la cartera y exigir la dimisión de Temer. El escenario principal de estas manifestaciones fue la sede del Ministerio de Cultura, desde donde aseguraron que el Gobierno interino no representa a la población brasileña, debido a que no incluye jóvenes, mujeres, afrodescendientes, ni indígenas.
“Estamos aquí porque [Temer] ha abolido el Ministerio de Cultura, pero también porque no queremos que el Ministerio tenga este presidente. Queremos que este presidente se retire del cargo”, comentó uno de los organizadores de la protesta, Julio Barroso, quien añadió que esta cartera le pertenece al pueblo brasileño.
Asimismo, criticaron que el Ministerio de las Mujeres, Igualdad Racial y Derechos Humanos haya sido fusionado al de Justicia. Advirtieron que no dejarán que todas esas medidas sean aplicadas sin resistencia.
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En contexto
El Senado de Brasil aprobó el proceso de juicio político contra Dilma Rousseff el pasado 12 de mayo con 55 votos a favor, 22 en contra y 1 abstención (de 78 de los 81 miembros del cuerpo colegiado).
En este período las autoridades brasileñas se encargarán de encontrar las pruebas contra la mandataria que no fueron presentadas ni en la Cámara baja ni en el Senado.
La acusación central de la oposición contra Rousseff para justificar un juicio político es la supuesta violación de normas fiscales al maquillar el déficit presupuestario de 2015. Sin embargo, no se han presentado pruebas en su contra.
Analistas políticos aseguran que Temer, con solo siete días en el poder, vive un momento de inestabilidad en su Gobierno provisional por su afán de entregar el país al Fondo Monetario Internacional (FMI), banqueros y empresarios.
