Ante la falta de pagos salariales por parte del Estado, trabajadores del teatro realizaron una campaña para recaudar alimentos para subsistir ante la precariedad y el hambre.
La crisis económica que atraviesa Brasil llegó al Teatro Municipal de Río de Janeiro, que debido a continuos retrasos en el pago de salarios por parte del Estado, se vieron obligados a recaudar alimentos para los empleados que se encuentran en situación precaria.
"Los trabajadores ya no tienen dinero ni para ir a trabajar todos los días, la semana pasada hicimos una campaña que recaudó tres toneladas de alimentos", dijo Pedro Ismael de Oliveira, cantante del coro.
Los 550 trabajadores del Teatro Municipal de Río, uno de los más prestigiosos de América Latina, dependen directamente del Estado de Río de Janeiro, que en julio de 2016 decretó situación de "calamidad financiera" para todo su territorio y aún no ha cancelado a los trabajadores del teatro el pago extra de Navidad ni el pago correspondiente a abril.
"El primer bailarín está casado con otra bailarina y tienen un hijo pequeño, él tuvo que vender su carro para pagar los gastos y ahora usa el de su madre para trabajar como conductor de Uber. Algunas bailarinas buscan dinero extra limpiando casas de amigas, una violinista empezó a cocinar menús de comida, mientras que otras bailarinas ya piensan en emigrar; la primera bailarina se muda a Salzburgo, Austria, la próxima semana", lamentó.
Desde hace meses, Río de Janeiro se ha visto envuelto en protestas de todo tipo por la falta de pagos y recortes de impuestos por parte del Gobierno del presidente no electo de Brasil, Michel Temer