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El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil autorizó el lunes la apertura de dos nuevas investigaciones contra el actual presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, por acusaciones de corrupción.
>> Miles piden destituir a Eduardo Cunha de su cargo en Brasil.
Cunha fue el encargado de iniciar los trámites para el pedido de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff.
El político brasileño ya posee tres procesos en marcha en la máxima corte del país, informaron fuentes oficiales.
El inicio de estas investigaciones fueron ordenadas por el instructor en el Supremo Tribunal Federal, Teori Zavascki, quien lleva todos los procesos vinculados con el gigantesco escándalo de corrupción Lava Jato, según informó la propia corte.
Al menos tres delatores que colaboran en la investigación de los desvíos en la estatal Petrobras han entregado pruebas que muestran que Cunha recibió 5.1 millones de dólares por haber intermediado un contrato ilegal de la petrolera.
De acuerdo con el relator del caso , Teori Zavascki, hay "elementos más que suficientes" para transferir dinero sucio al exdirector Nestor Cervero en el fletamento de buques de Petrobras.
El juez razonó, sin embargo, que al menos en los años 2006 y 2007, cuando se celebraron contratos para buques de perforación con Samsung Heavy Industries, no existen indicios de la participación del presidente de la Cámara de Representantes.
Las faltas relacionadas a hechos de corrupción cometidos por soborno y lavado de dinero constituye una violación al Código de Ética de la Cámara de Diputados y, de comprobarse, puede ser sancionada hasta con la pérdida del mandato del legislador.
El presidente de los Diputados ha aprovechado su cargo para intimidar a parlamentarios mediante numerosos recursos y maniobras, además de dilatar al máximo el proceso que le abrió en octubre pasado el Consejo de Ética.
