• Telesur Señal en Vivo
  • Telesur Solo Audio
  • facebook
  • twitter
Para que el impeachment proceda es necesario que se tengan 172 votos, pero fuentes gubernamentales informaron que tienen 200 votos a favor para impedir el proceso.

Para que el impeachment proceda es necesario que se tengan 172 votos, pero fuentes gubernamentales informaron que tienen 200 votos a favor para impedir el proceso. | Foto: EFE

Publicado 16 abril 2016



Blogs


Para sectores políticos internacionales parece curioso que entre quienes juzgan a Dilma Rousseff hayan personas acusadas y hasta imputadas. 

En Brasil este sábado se reanudan los debates sobre la posible admisión del pedido de juicio político contra la presidenta de ese país, Dilma Rousseff, acusada de incurrir en delito de responsabilidad.

Luego, este domingo, se efectuará la votación que determinará si este pedido de impeachment (juicio político) procederá o no.

En cuanto al debate de este sábado de la Cámara de Diputados, se incribieron 249 de los 513 congresistas que conforman el legislativo. Con un derecho de palabra de tres minutos para cada uno, se estima que la discusión dure unas 13 horas.

Se prevé que la jornada sea más extensa, puesto que los líderes de los 25 partidos políticos, representados en la Cámara Baja, tendrán derecho de palabra al término de cada sesión, que puede durar máximo 5 horas, informó la Agencia Brasil.

>> Presentan medida cautelar contra juicio político a Rousseff

El pedido de impeachment puede no avanzar

Fuentes gubernamentales confían en que el pedido de juicio política contra Rousseff no procederá.

El jefe del gabinete personal de la Presidencia, Jaques Wagner, manifestó que ya cuenta con el apoyo de 200 diputados para frenar el proceso que destituiría de sus funciones a la presidenta de Brasil, en caso de continuar.

Cabe acotar que para que esto ocurra hace falta que 172 legisladores voten a favor del impeachment.

Wagner indicó que este aumento en el apoyo a Rousseff es gracias al trabajo de los gobernadores aliados.

Entre tanto, el diario Folha de Sao Paulo, el segundo medio de comunicación con más circulación en Brasil, reconoció que la oposición no contaba con los 342 votos requeridos para que el pedido de juicio político pasara al Senado, el organismo que finalmente debía aceptar o no llevar adelante dicho proceso.

En este sentido, el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Waldir Maranhão, informó que votaría en contra del impeachment. Por su parte, Clarissa Garotinho, una de las congresitas que se mostraba favorable al proceso, solicitó licencia de maternidad y no acudirá a votar.

>> STF de Brasil rechaza la solicitud de suspensión de juicio político a Rousseff

Apoyo internacional para Dilma Rousseff

El secretario general de la Organización de Estados Américanos (OEA), Luis Almagro, ofreció su apoyo a la jefa de Estado; y al tiempo que le asignó al proceso un "carácter político", indicó que este carece de certezas jurídicas y solo siembra desconfianza en el organismo interamericano.

"Las dudas pasan por los planos ético, político y jurídico", apuntó, no sin antes remarcar el hecho de que le llama la atención que "mientras sobre la Presidenta no recae ninguna acusación penal, entre quienes la juzgan hay personas acusadas y hasta imputadas".

Pueblo de Brasil denuncia un intento de golpe de Estado

Los upuestos pecados de Rousseff aún no están claros para la mayoría de la población. Además, parecen proporcionalmente pequeños ante un Congreso atestado de diputados investigados por corrupción, que en el último año se ha especializado en aprobar aumentos de gastos populistas.

Rousseff no está implicada en ningún caso de corrupción. Nadie la ha acusado hasta ahora de haberse llevado dinero a su casa. La paradoja ha sumergido a los brasileños en una exaltada discusión sobre la naturaleza del impeachment, mezcla de juicio jurídico y voto de desconfianza parlamentaria. 

Esta situación lleva al pueblo a denunciar un intento de golpe de Estado contra la mandataria por parte de sus enemigos políticos, que buscan tomar en el poder. 

Mientras, el vicepresidente de Brasil Michel Temer, antiguo aliado de la presidenta, ahora convertido en su peor enemigo junto con Eduardo Cunha, aguarda pacientemente entre bastidores a hacerse con las riendas del Estado.

>> Continúan manifestaciones en rechazo al golpe contra Rousseff

En contexto
El Congreso y la derecha de brasileña implementaron un plan para difamar a Rousseff y desprestigiar los logros alcanzados por su Gobierno en beneficio del pueblo.
Ellos intentan enjuiciar a la jefa de Estado por un presunto caso de corrupción en la estatal Petrobras. El delito del que se le "acusa" es de violar la ley de responsabilidad fiscal por créditos complementarios en el presupuesto, causal que no constituye motivo para ser separada de su cargo.
En caso de que proceda el pedido de juicio político y el dictamen del Senado sea favorable a los deseo de la oposición, Rousseff deberá separarse de su cargo durante 180 días, plazo en que la Cámara Alta deberá concluir el proceso abierto.
El vicepresidente Michel Temer será quien reemplace a la presidenta de Brasil por 180 días.

Comentarios
0
Comentarios
Nota sin comentarios.