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Desde la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco instó a los jóvenes a que entiendan que la felicidad no depende de tener muchas cosas ni se trata de un "app que se descarga en el teléfono móvil".
La cabeza de la Iglesia católica también dijo a los jóvenes que debían luchar por un "amor concreto", y no por uno "de telenovela".
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Queridos jóvenes, sus nombres están escritos en el cielo, en el corazón misericordioso del Padre. ¡Sean valientes, vayan contracorriente!
— Papa Francisco (@Pontifex_es) 23 de abril de 2016
"Ni siquiera la versión más reciente podrá ayudaros a ser libres y grandes en el amor", indicó el pontífice en su homilía en una misa que ofició ante la basílica de San Pedro para miles de adolescentes entre los 13 y 16 años de edad.
"No confiéis en quien os distrae de la verdadera riqueza, que sois vosotros, cuando os digan que la vida es bonita solo si se tienen muchas cosas", añadió el Papa, quien además apuntó que debían desconfiar de quienes les digan que debían fingir fortaleza como "los héroes de las películas" o siempre estar a la moda para ser felices.
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El Sumo Pontífice también recordó a los jóvenes que el amor es la verdadera identidad de un cristiano y que éste debe ser concreto y no andar "en las nubes".
Pero el líder católico no se quedó allí, y describió que este amor debe estar libre de la pretensión de desear a la persona como se desean los objetos personales, este debe ser en libertad.
"Siempre existe la tentación de contaminar el afecto con la pretensión instintiva de tomar, de 'poseer' aquello que me gusta. Y también, la cultura consumista refuerza esta tendencia (...) Pero cualquier cosa, cuando se exprime demasiado, se desgasta, se estropea; después se queda uno decepcionado con el vacío dentro", explicó el Papa argentino durante la mira.
Por último en referencia a la obsesión que muchos jóvenes guardan con la tecnología, el papa hizo un símil con la vida de un cristiano: "si en vuestra vida no está Jesús es como si no tuvierais cobertura", reflexionó.
