El gabinete del Gobierno palestino, reunido este martes en la ciudad cisjordana de Ramala bajo la dirección del primer ministro, Rami Hamdala, condenó duramente la medida anunciada este domingo por Israel de anexarse 400 hectáreas de terreno de los distritos de Belén y Hebrón.
"El gabinete rechaza duramente la decisión de la ocupación israelí de anexarse unas 400 hectáreas de tierra palestina cerca de Belén y Hebrón, en Cisjordania, y considera este acto un crimen de guerra y parte de las continuas violaciones de la ocupación", señaló un comunicado difundido por el Gobierno palestino.
El Ejecutivo de la unidad de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) entró en funciones el pasado 2 de junio, tras años de disensión política entre los movimientos rivales Al Fatah y Hamás, y está integrado fundamentalmente por figuras independientes.
Israel declaró las 400 hectáreas como "tierras estatales" el pasado domingo, tras argumentar que -según el gobierno sionista- no existen reivindicaciones privadas a esas tierras por parte de palestinos.