La justicia boliviana ordenó la detención del tesorero de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol), Carlos Chávez, como parte de una investigación por corrupción en el seno del organismo.
Esta medida determinada por el juez Roberto Valdivieso contempla la reclusión de Chávez en el penal de Palmasola, en la ciudad de Santa Cruz (al este del país), mientras se desarrollan las indagaciones.
Valdivieso considera que la conducta del dirigente (quien rechazó la medida) "está ligada a presuntos actos de corrupción", por lo que una detención preventiva evitará "algunos riesgos de fuga y obstaculización".
Chávez rechazó las acusaciones y asegura que la medida responde a "una intervención directa, un atropello, no sólo a mi persona, sino a la Conmebol, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la FIFA".
La Fiscalía boliviana emitió el pasado viernes la orden de detención contra Chávez y el secretario Ejecutivo de la FBF, Alberto Lozada, miembro del tribunal disciplinario de la Confederación Sudamericana de Fútbol.
Chávez es acusado por "organización criminal, legitimación de ganancias ilícitas, uso indebido de influencias, beneficios en razón del cargo, delitos tributarios y estafa con la agravante de víctimas múltiples".
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