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El "Moulin Rouge" de París (Francia), cuna del cancán, celebra este lunes sus 125 años. Cerca del 97 por ciento de personas asiste las 365 noches del año a los dos espectáculos diarios consecutivos (21H00 y 23H00) que reúne en total a unos mil 800 espectadores.
La mayoría de turistas que asiste a la cuna del cancán provienen de Rusia, China y América del Norte. El año pasado, el volumen de negocios del cabaret, que emplea a 450 personas, llegó a los 65 millones de euros (80 millones de dólares).
Cada noche, la magia renace con una revista que sigue la gran tradición de las plumas y la pedrería, celebrando la belleza de las 60 "Doriss Girls".
Los 20 "Doriss Boys", que las acompañan en el escenario junto a una decena de artistas, acróbatas y malabaristas, deben medir al menos 1,85 mts.
El espectáculo se extiende dos horas, en el decorado Belle Époque (Época Bella en francés) con la estética de una pujanza económica en la inmensa sala del Moulin, para asistir al "único, al original French Cancán", dijo el director del cabaret Jean-Jacques Clérico.
El Moulin Rouge abrió sus puertas en 1889. El cabaret se convirtió en un lugar emblemático de la vida parisina. Los espectadores disfrutan de la audaz danza con las piernas levantadas, que dejan ver los frufrús, y que el inglés Charles Morton bautizaría como French Cancan, un ejercicio de baile que requiere especiales cualidades artísticas y físicas.
La muerte de la maestra de baile del Moulin Rouge desde 1957, Doris Haug, a los 87 años ensombreció el aniversario. Sus "Doriss Girls" le rindieron homenaje la semana pasada, en una misa en el barrio parisino de Montmartre (colina de 130 metros de altura situada en la orilla derecha del río Sena en París).
