La dirigente sindical argentina Milagro Sala anunció este martes su decisión de levantar la huelga de hambre que había comenzado el pasado 12 de agosto en protesta por el estado de incomunicación con el que fue sancionada en la cárcel.
"He levantado la huelga de hambre por pedido de mi familia, ya que no quiero que se sigan preocupando", escribió Sala en una carta entregada al juez Isidoro Cruz y difundida en las redes sociales.
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Sala canceló la protesta que había iniciado en la prisión de mujeres Alto Comedero, ubicada en la provincia de Jujuy (norte), a raíz de la sanción que recibió por mal comportamiento, según explicó el jefe del Servicio Penitenciario provincial, Víctor Carlos Morales.
En la medianoche del lunes, la organización barrial Tupac Amaru, que dirige Sala, levantó un campamento en Buenos Aires, frente a la sede de Gobierno, para exigir el cese inmediato del castigo.
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Allí anunciaron que iniciaban una huelga de hambre dos dirigentes de Tupac Amaru, Alejandro Gafagnini y Nélida Rojas, así como líderes de otras organizaciones, el sacerdote Francisco Olivera, de Curas en Opción Por Los Pobres, y Gumercinda Giménez, de las Madres Contra la Violencia Institucional, además de una docente de la Universidad de Buenos Aires, Ana González.