Más de 24 mil trabajadores públicos de Argentina han sido despedidos por el nuevo Gobierno del derechista Mauricio Macri, que durante su campaña prometió un país de oportunidades bajo el “lema de pobreza cero”.
Muchos de los trabajadores despedidos se dedicaban a la promoción de planes del Estado en barrios más necesitados del país, otros se encargaban de analizar los precios de productos de consumo masivo y de suministrar información a las fuerzas policiales y militares de la nación.
Las políticas de Gobierno que adelanta Macri no sólo afectaron a los más de dos mil trabajadores del Congreso que fueron despedidos por pensar diferente, también dejó sin empleo a unos 489 funcionarios del ministerio de Justicia que se dedicaban a los casos de violencia institucional y al seguimientos de juicios de lesa humanidad.
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) asegura que las nuevas autoridades de Argentina no tienen criterio para aprobar despidos injustificados en una nación donde las oportunidades de empleo son para todos los argentinos sin distinción política ni religiosa.
“Los despidos fueron intempestivos, muchas veces sin una comunicación directa con el trabajador y en numerosos casos con interrogatorios para que los empleados “pisen el palito” con alusiones a la simpatía política o la militancia”, denunció Javier Lewkowicz, periodista de Página 12.
Conozca lo que ha hecho Macri a un mes de su Gobierno