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En su discurso en la 71° Asamblea General de Naciones Unidas el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se refirió a temas de economía, gobernanza, terrorismo y cooperación internacional.
Al iniciar su participación, el mandatario estadounidense recordó algunos de los avances durante su administración como el acercamiento a Cuba, la lucha contra el terrorismo y el impulso del modelo democrático en el mundo. Destacó que algunos de sus logros no se habrían llevado a cabo sin la colaboración de las otras naciones del mundo.
Pese a hablar de progreso y avances, el Gobierno de Estados Unidos sigue alimentando el bloqueo contra Cuba que ha dejado millonarias pérdidas a la isla caribeña y ha afectado la vida del pueblo cubano. Asimismo, ha impulsado y avalado sanciones contra Rusia.
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Barack Obama indicó que a pesar de haber colaborado con la "protección" del mundo, la actual crisis de refugiados, la guerra en Siria y la inestabilidad en el medio oriente, el terrorismo pone en peligro la estabilidad global. “Tenemos ante nosotros un desafío, podemos optar por promover una mayor cooperación u ocultarnos en los conflictos”, agregó Obama.
Asimismo, habló de estabilidad global, sin embargo, su nación ha apoyado y financiado a los grupos rebeldes en Siria y a los extremistas, prolongando un conflicto por más de cinco años, que ha dejado más de seis millones de desplazados sirios.
El presidente Obama sostuvo que hay que trabajar y proponer modelos económicos que logren disminuir la brecha entre ricos y pobres. “Las economías tienen más éxito cuando se cierra la brecha entre ricos y pobres, darle más oportunidad a los trabajadores”.
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Ante esta declaración, el líder estadounidense dijo que en su país se han vulnerado los derechos de los sindicatos que ha afectado a la masa laboral, y reiteró el llamado a responder a los nuevos desafíos económicos, impulsando el libre mercado y la integración económica global.
El mandatario habló de economía y el respeto a los derechos de los trabajadores, pero las políticas laborales en su país limitan los derechos de los trabajadores en beneficio de la política neoliberal y capitalista que solo beneficia a los ricos.
En otro punto, Obama pidió a los gobiernos del mundo a crear y fomentar nuevos modelos de gobernanza que lleven al desarrollo y respeto de las libertades individuales.
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También recordó que su país ha hecho frente a las amenazas del fundamentalismo, el sectarismo, el nacionalismo, así como la persecución por motivos religiosos para prevenir la generación de nuevos conflictos y añadió que estas ideas han impulsado la guerra en Siria y la relación entre Israel y Palestina.
Obama manifestó que los palestinos deben "rechazar la incitación (a la violencia) y reconocer la legitimidad de Israel", y agregó que Israel debe "admitir que no puede ocupar permanentemente las tierras palestinas con asentamientos".
Desde octubre de 2015, el conflicto entre ambas naciones se agudizó producto de las incursiones y profanaciones llevadas a cabo en la Mezquita Al-Aqsa, ubicada en Jerusalén.
Más de 220 palestinos han fallecido y cientos han terminado heridos, en Cisjordania, Jerusalén y la Franja de Gaza, desde la fecha.
Organismos internacionales y diversas naciones del mundo, piden una salida pacífica y la solución de dos Estados, libres e independientes. Sin embargo, el gobierno del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, continúa las actividades de guerra y de ocupación de territorio palestino.
Barack Obama acusó a Rusia de querer recobrar su pasado imperial por medio de la fuerza y aseguró que los sucesos en Ucrania no se debieron a un plan internacional, sino a una "legítima" protesta del pueblo ucraniano que reclamaban una transformación política y social.
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Al acusar a Moscú de amenaza al orden global, Obama desconoció que su país ha realizado operaciones bélicas y ha invadido a naciones en todos los continentes del planeta como medio para expandir su poderío militar y económico.
En su discurso, el presidente estadounidense no habló sobre su política migratoria que ha afectado a miles de trabajadores, la desigualdad social y el racismo en su país, de su promesa fallida del cierre de la prisión de Guantánamo o del fin del bloqueo financiero, económico y comercial a Cuba.
