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Clarisa López Ramos, hija del recientemente liberado activista independentista puertorriqueño Oscar López Rivera agradeció este jueves a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua la solidaridad mostrada con su padre, quien fue conmutado el pasado martes por el presidente saliente de Estados Unidos (EE.UU.), Barack Obama.
“Hoy celebramos la victoria del pueblo de Puerto Rico; mi más profundo agradecimiento a los gobiernos de Cuba, Venezuela y Nicaragua”, manifestó Ramos durante una rueda de prensa en la capital de Puerto Rico, San Juan.
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La hija del prisionero político puertorriqueño de 74 años de edad, 35 de los cuales pasó en una cárcel en EE.UU. por su lucha por la independencia de Puerto Rico, reveló que estaba feliz porque Obama anunció la culminación de su condena poco antes de ella cumplir sus 46 años de edad.
“Mi papá siempre quiso que yo recibiera su libertad como un regalo de cumpleaños”, apuntó Ramos, poco antes de salir para la ciudad estadounidense de Chicago para reunirse con la abogada Jan Susler, con la cual visitará este fin de semana a su padre en la cárcel de Terre Haute, en el estado de Indiana (noreste) de EE.UU..
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“Las pasadas horas han sido las más felices de mi vida, soy la hija más afortunada del mundo, porque tengo al padre más maravilloso, amoroso, sensible, solidario, el que me enseñó a resistir y a luchar”, agregó.
Durante la rueda de prensa la alcaldesa de San Juan, Carmen Soto Cruz, reiteró a Ramos la decisión de ofrecerle a López Rivera un trabajo estable durante su regreso a la isla.
