Autoridades de Vanuatu declararon estado de emergencia este domingo tras el paso del ciclón Pam, tormenta tropical que ha dejado ocho muertos y graves afectaciones.
El ministro de territorio, Ralph Regenvanu, explicó que el estado de emergencia ha sido declarado en la provincia de Shefa, que incluye Port Vila (capital), aunque advirtió que es posible extender la medida a otras zonas debido al alcance de los daños ocasionados por la tormenta.
De momento los equipos de rescate intentan acceder a las comunidades remotas afectadas de esta pequeña nación del Pacífico Sur.
Varias zonas del país se encuentran incomunicadas debido a las graves afectaciones del ciclón, que pudiera haber dejado unas 44 personas muertas según organizaciones humanitarias.
Países como Australia, Nueva Zelanda y Nueva Caledonia han expresado su disposición de prestar ayuda internacional y es posible que la misma comience a llegar después que las pistas de aterrizaje del aeropuerto de Vanuatu sean reabiertas, debido a que el mismo quedó inundado.
Cruz Roja de Australia y Save the Children tiene previsto entregar ayudas junto con la organización Oxfam, para dotar de prioridades inmediatas como alojamiento, agua potable e instalaciones sanitarias para los miles de damnificados.
Según reseñaron los medios locales, la jefa de la oficina regional de la Cruz Roja en Suva (Fiyi), Aurelia Balpe, “ha informado de que la organización está enviando 12 mil lonas impermeables, 2 mil 400 botiquines de primeros auxilios, 900 contenedores de agua y especialistas en cuestiones de alojamiento a bordo de un avión militar neozelandés”.
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