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El presidente de Ecuador, Rafael Correa, firmó el martes pasado un decreto que permite la extensión del estado de excepción por 30 días más a fines de permitir la restauración de las localidades en Manabí y Esmeralda, devastadas por el terremoto que sacudió ese país el pasado 16 de abril.
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El anuncio de la firma del estado de excepción se dio en la ciudad de Portoviejo, capital de Manabí, lugar donde el jefe de Estado se encontraba supervisando obras que están en proceso de reconstrucción. Desde el lugar, dio a conocer que se han destinado mil millones de dólares para la reconstrucción de las provincias y que el 80 por ciento de ese dinero se ha utilizado en la reconstrucción de Manabí por ser esta la zona más afectada.
"El mundo está impresionado, vienen delegaciones de otros países, nosotros hemos pedido asesoría de países como Chile que han tenido tragedias similares a la que nosotros enfrentamos y se quedan sorprendidos de la rapidez con la que hemos actuado y de cómo marcha la reconstrucción", manifestó.
Correa aseguró que en los albergues se encuentran menos de 6 mil personas de las decenas de miles de damnificados que habían ingresado. Además, expresó que se han reconstruido varias carreteras y aproximadamente 30 escuelas. Asimismo, señaló que ya comenzó la edificación de viviendas y hospitales.
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El primer mandatario aprovechó el momento para anunciar cómo ha sido el proceso de reactivación económica de Manabí, donde decenas de personas han reabierto sus negocios, según información del servicio de Rentas Internas.
También expresó que se han contratado arquitectos de primer nivel para trabajar en las labores de reordenamiento urbano en las ciudades afectadas. El presidente destacó la importancia de la planificación a fines de evitar nuevamente la construcción en zonas de riesgo.
