El presidente de los Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, decidió avanzar en la construcción de los oleoductos Keystone XL y Dakota Access, reportó un medio local.
La decisión es tomada 4 días después de que Trump asumiera la presidencia de los Estados Unidos y es parte de la promesa que realizó durante su campaña en la cual afirmaba que daría mayor libertad a la industria petrolera de ampliar su infraestructura.
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El secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, anunció que la finalidad de Trump es "equilibrar" la protección ambiental y la economía.
Por su parte, TransCanadá no ha solicitado el permiso para construir el oleoducto, sin embargo, la compañía anunció que estaba buscando la forma de convencer al nuevo Gobierno de EE.UU. de los beneficios que ese proyecto dará a la economía de ese país. La empresa ha dejado claro que está "comprometida con Keystone XL".
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En contexto
Tanto el gasoducto Keystone de TransCanadá Corp. como el proyecto Dakota Access de 3 mil 800 millones de dólares fueron negados por el expresidente Barack Obama.
Sin embargo, a pesar de la negativa de Obama, quien suspendió los trabajos en el territorio cercano a Lake Oahe en Dakota del Norte, Trump ha decidido poner nuevamente en marcha la fabricación del oleoducto
Activistas y miembros de la tribu Standing Rock Sioux se oponen a la construcción, debido a que consideran que no se tomó en cuenta el impacto que esta tendrá en el agua y en lugares de importancia cultural o histórica.