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La Alta Comisionada DD.HH. de la ONU exhortó a los miembros del Consejo de Seguridad a poner fin a los conflictos internacionales y que no prevalezcan los intereses nacionales.
La saliente Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció este jueves la incapacidad del Consejo de Seguridad para poner fin a los conflictos internacionales, sobre todo por la prevalencia de los intereses nacionales.
Navi Pillay, quien renunció a su cargo luego de seis años y lo deja formalmente el próximo 31 de agosto, consideró que “no ha habido una decisión firme y de principios de los miembros (del Consejo) de poner fin a las crisis”. A su vez, exhortó a los 15 Estados miembros "a desarrollar un concepto más amplio que el del interés nacional".
"Realmente creo que una respuesta más firme de este Consejo podría salvar cientos de vidas", agregó Pillay.
La diplomática estimó también que la utilización del derecho de veto constituye "una táctica de corto plazo y en definitiva contraproducente".
El uso del derecho a veto por parte de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad (Reino Unido, Francia, Rusia, China y EE.UU.) revela profundas divisiones.
En mayo, Rusia y China opusieron su veto a un proyecto de resolución que habría permitido a la Corte Penal Internacional (CPI) abrir causas en Siria por crímenes de guerra.
Estados Unidos, que veta habitualmente resoluciones contra Israel, bloqueó en días pasados un texto particularmente fuerte sobre el conflicto en Gaza.
Mientras tanto Consejo de Seguridad está haciendo frente actualmente a un importante número de crisis internacionales en países como Irak, Siria, Gaza, Sudán del Sur, Ucrania y República Centroafricana.
Navi Pillay ha ocupado el cargo de Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU desde septiembre del 2008, más que cualquiera de sus predecesores, que sólo cumplieron un mandato.
La sudafricana, de origen indio, aceptó renovar su cargo pero sólo por medio mandato, algo que el Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, aceptó.
Durante estos 6 años, Pillay ha denunciado violaciones de derechos humanos en todos los rincones del mundo, pero especialmente ha hecho hincapié en la lucha contra la discriminación en cualquiera de sus formas.
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