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Entre 2009 y 2010 los expertos adelantaron que se estaban aplicando técnicas avanzadas para comprobar todas las pruebas necesarias que esclarecieran las causas del asesinato del presidente norteamericano.
Científicos estadounidenses realizaron un estudio minucioso que comprobó la autenticidad de una fotografía donde el supuesto homicida del expresidente John F. Kennedy muestra el arma con la que presuntamente habría cometido el crimen.
Se trata de una imagen en la cual Lee Harvey Oswald, principal sospechoso del hecho, posa en el patio trasero de su vivienda con un rifle de largo alcance y con mira telescópica, pero que en algunos análisis pasados fue considerada como falsa.
Sin embargo, los resultados del estudio realizado por los científicos del Dartmouth College, a través de una nueva técnica forense y un modelo en tres dimensiones de Oswald, descartaron cualquier hipótesis que niegue la legitimidad de la foto.
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El análisis demostró que la postura del posible asesino, la iluminación y las sombras son físicamente plausibles, ademásde que la longitud del rifle es acorde con la del arma utilizada para asesinar al expresidente.
"Queda descartada una supuesta manipulación de la foto. Además, con un simple ajuste de la altura y el peso, creemos que nuestra técnica de modelado en 3D corrobora la naturalidad de una de las pruebas más importantes en este proceso de investigación, afirmó, Hany Farid, profesor de Ciencias de la Computación e investigador pionero en ciencia forense digital.
La polémica imagen habría sido tomada por la esposa de Oswald y representa, entre otras, una de las principales evidencias de su culpabilidad. La insistente teoría de su falsedad abrió el debate sobre la posible existencia de una conspiración para matar a Kennedy, a juicio de algunos expertos que han llevado el caso.
Aún existes muchas incógnitas que giran en torno al asesinato de Kennedy
Un documental del investigador Colin McLaren y el autor Bonar Menninger afirma que el agente del Servicio Secreto George Hickey disparó una de las balas del crimen.
Por otro lado, otra hipótesis sostiene el autor intelectual del magnicidio sería el entonces vicepresidente Lyndon Johnson, quien ocupó la Presidencia luego del hecho.
Entretanto, la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA) también estaría implicada en este caso. Según algunas versiones, la CIA quiso vengarse del exmandatario tras su negativa de proporcionar apoyo militar a la invasión organizada contra Cuba en 1961. Durante esa operación, ocurrida en la Bahía de Cochinos, en el sur de la isla, las fuerzas cubanas derrotaron a los invasores armados y entrenados por la CIA en menos de 72 horas.
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