Cuando faltan menos de 24 horas para que inicien los comicios legislativos en Irán, este jueves se cerró la campaña electoral en la que todos los candidatos se centraron en el tema económico.
Los ciudadanos elegirán 290 diputados del Parlamento de entre más de 6 mil candidatos, al tiempo que renovarán a los 88 miembros de la Asamblea de Expertos de entre 166 clérigos.
Durante la corta campaña electoral que arrancó el pasado jueves 18 de febrero, los aspirantes llamaron al voto útil, además, la parte conservadora se enfocó en su intento de desprestigiar a los aliados del presidente, Hasán Rohaní, favoritos para reafirmar en el Parlamento la progresiva apertura del país.
Según informa el ministro del Interior, Abdolreza Rahmaní Fazlí, los 52 mil colegios electorales, repartidos en las 207 circunscripciones del país, abrirán sus puertas a las 8 de la mañana y recibirán votos hasta las 8 de la noche o "hasta que sea necesario si hay gente esperando para votar".
Asimismo, el Ministerio de Interior informó sin ofrecer detalle al respecto, que este miércoles mil 385 candidatos a los comicios legislativos, es decir el 20 por ciento de los aspirantes, decidieron retirarse de la contienda.
Mujeres buscan mejor representación
Del total de los candidatos, al menos el 10 por ciento son mujeres.
Las mujeres iraníes, que representan más de la mitad de la población pero sólo el 3 por ciento de los diputados del Parlamento, aspiran a ocupar más escaños en la nueva Asamblea Legislativa que se elige este viernes.
Sólo 500 son mujeres y ninguna figura en la lista de aspirantes a la Asamblea de Expertos.
Rohani nombró tres mujeres vicepresidentas, pero en el Parlamento sólo hay nueve diputadas de un total de 290.
El primer objetivo es obtener en estas elecciones una cincuentena de diputadas, lo que sería un gran paso adelante, explica Jila Shariatpanahi, una de las militantes influyentes de la campaña.
"En el Parlamento o en la Asamblea de Expertos nuestro objetivo es luchar contra la discriminación", dijo Shariatpanahi.
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