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Las autoridades brasileñas informaron este jueves el cierre de cuatro parques naturales del estado de Espírito Santo (sureste), ante el riesgo de la extensión de la fiebre amarilla, una enfermedad que se ha cobrado la vida de al menos 40 personas en varias zonas de ese país suramericano desde que comenzó el 2017.
Los parques Pedra Azul, Forno Grande, Mata das Flores y Cachoeira da Fumaça de ese estado permanecerán cerrados a partir de este viernes de manera temporal, según señaló la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Hídricos de Espírito Santo.
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#Brasil vive mayor brote de fiebre amarilla en 14 años. Autoridades confirman 70 casos y 40 muertes https://t.co/wK41y1RJRC
— Adriana Robreño (@AdrianateleSUR) 25 de enero de 2017
Otras dos reservas naturales, también en Espíritu Santo, serán vigiladas sin descartar su cierre en caso de que las autoridades sanitarias así lo consideren.
La Secretaría estatal de Salud dijo que la decisión de impedir el acceso a estas unidades tiene como objetivo preservar a los visitantes del virus, así como proteger a la fauna de la zona de un posible contagio.
Por su parte, el ministro de Salud de Brasil, Ricardo Barros, aseguró días antes que existen las vacunas necesarias para ser distribuidas entre la población afectada.
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