Tras el hundimiento del ferry Sewol en aguas surcoreanas el pasado mes de abril, este martes el Tribunal del Distrito de Gwangju (suroeste de Corea del Sur) declaró a Lee Joon-seok, de 68 años, culpable de homicidio accidental, ya que escapó del buque sin atender a la seguridad de los pasajeros durante el naufragio del 16 de abril, en el que murieron 304 personas.
Joon-seok fue condenado a 36 años de prisión por abandonar a los pasajeros en el momento de hundirse el Sewol.
El tribunal también condenó este martes a 30 años de cárcel al jefe de máquinas, a 20 años al primer oficial del ferri y a 15 años al segundo oficial, por omitir su deber de socorro cuando se hundía el buque.
Además del juicio al capitán y a los tripulantes, existen otros procesos abiertos contra funcionarios y directivos de la naviera del buque para depurar responsabilidades en el caso, al descubrirse irregularidades que pudieron haber provocado el accidente.
Fin de la búsqueda
Tras casi siete meses después de que ocurriera el hundimiento del Sewol, el Gobierno de Corea del Sur anunció este martes que ha puesto fin a las operaciones de búsqueda de los todavía nueve desaparecidos del naufragio del buque.
El último cuerpo se recuperó el pasado 28 de octubre, más de tres meses después de que se recuperara el anterior.
El ministro de los Océanos y la Pesca, Lee Ju-young, se disculpó ante las familias de los desaparecidos, diciendo que lamenta haber faltado a su palabra de no detener la búsqueda hasta que se hallase el último cuerpo.