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La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, lanzó este miércoles el Plan Agrícola y Ganadero 2016-2017, en el que se invertirán 202 mil 800 millones de reales, unos 57 mil 940 millones de dólares en beneficio de los productores.
Esta cifra es superior a los Zafras anteriores y será importante para el crecimiento y la inversión, explicó la mandataria.
"Después vamos a tener mayores logros estructurales", acotó.
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Rousseff mencionó que durante su primer y segundo mandato ha lanzado seis planes Zafra, en los que lo primordial ha sido el interés por la agricultura, por el agro negocio, la agricultura familiar y el apoyo a los pequeños y medianos productores.
"Sin lugar a dudas la soberanía alimentaria es algo estratégico en un país en cualquier parte del mundo", dijo.
Reiteró que Brasil necesita este apoyo a la agricultura y a la agropecuaria. Mencionó que en esos seis años se invirtieron 905 mil millones de reales, de los que 43,3 mil millones eran subvenciones estratégicas para impulsar el trabajo de los productores.
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La mandataria agregó que la ganancia de tres billones de reales fue maravillosa para el país. "Esta cuenta resume lo que le puede dar la agricultura a Brasil", dijo.
También habló que la agricultura tiene efecto en la economía, porque representa el 46 por ciento de las exportaciones y el 23 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
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Rousseff señaló que este plan es un paso más para fortalecer y reconocer la importancia de esta actividad en Brasil.
Dijo que otro asunto muy importante es el tema del desarrollo tecnológico y la innovación en la que destaca el papel de la Empresa Brasileña de Investigación Agropecuaria (Embrapa).
"El tema agrícola es tan importante como la energía", sentenció.
La agricultura como vía de crecimiento
La Presidenta acotó que ha luchado contra el escenario político adverso que vive el país, mediante programas que tienen el objetivo de crear políticas y acciones para garantizar el crecimiento económico.
La representante del Poder Ejecutivo lamentó que algunos sectores de producción estén paralizados desde principios de año y que muchas de las Comisiones del Congreso Nacional no funcionen por causa de la desestabilización de la derecha.
"Sabemos que la importancia de la agricultura brasileña proviene de su diversidad. En esa diversidad hemos encontrado un espacio para crecer en todos los ámbitos, tanto en los pequeños como en los medianos productores", comentó.
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Plan Zafra no es base para acusación en juicio político
Roussef indicó que la ejecución del Plan Zafra 2015-2016 aparece como una de las irregularidades en el proceso fraudulento de juicio político que se adelanta en su contra.
La Presidenta agregó que en la argumentación se menciona el atraso en el pago del subsidio al banco que "no nos consta que sea una operación de crédito, es sólo un atraso", dijo.
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Asimismo, puntualizó que ese atraso lo pagó el Estado con 55 mil millones de reales a finales de diciembre de 2015 y no quedó nada pendiente.
"Estoy orgullosa de estos seis planes Zafra y estoy segura que fueron decisivos, fundamentales para el fortalecimiento de la agricultura brasileña", dijo.
30 mil millones de reales para agricultura familiar
El Gobierno de Brasil además ofrecerá 30 mil millones de reales en crédito para financiar el Plan Cosecha de Agricultura Familiar del lapso 2016-2017, que comienza el 1 de julio. El anuncio se hizo este martes durante la instalación del Plan.
Los recursos se dedicarán a las líneas de financiación para el cultivo, la producción y la inversión con tasas de interés por debajo de la inflación.
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Aunado al registro de crédito, el programa contiene una serie de medidas para estimular la agricultura familiar que es la responsable de suministrar en gran parte la comida de las familias brasileñas y dará un mayor apoyo a las cooperativas.
En contexto:
Brasil es escenario de un golpe blando, como lo califican analistas internacionales, a través de un proceso de juicio político que puede ser aprobado en un Senado de mayoría opositora.
Sin ningún delito tangible, como lo alega la defensa de la mandataria, pretenden enjuiciar a la Presidenta que llegó al Gobierno con más de 50 millones de votos, y que aún goza de un nivel de aceptación mayoritario, sobre todo en la clase obrera.
El vicepresidente de Brasil, Michel Temer, quien rompió nexos con el Gobierno dice estar "preparado para asumir el poder e incluso se adelantó a los hechos y presentó un supuesto Plan de Gobierno y la conformación de su posible Gabinete.
Esta semana es decisiva para Brasil, ya que lo que está en juego no es la presidencia del país, sino el destino de una nación, su democracia, sus derechos laborales, sus logros sociales incluyendo la integración latinoamericana.
