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Los aspirantes a la presidencia de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), Ali bin Al Hussein y Joseph Blatter, defendieron este viernes ante el 65 Congreso de la organización sus candidaturas para dirigir el principal organismo del más universal de los deportes.
En una cita que se desarrolla en medio de los casos de corrupción que afectan a importantes directivos de la FIFA , ambos aspirantes defendieron sus ideas en torno al desarrollo del fútbol y al camino que debe seguir en lo adelante su cuerpo de dirección.
“No necesitamos revoluciones, sino evoluciones”, expresó en su discurso Blatter, quien aspira a un quinto mandato al frente del organismo internacional.
Tras haberse desligado la víspera de los escándalos que afectan a importantes figuras de la federación, el actual presidente dijo que en los días anteriores diversas voces lo habían querido responsabilizar por la tormenta que vive la FIFA.
Está bien, tomo esa responsabilidad, la acepto, pero quiero arreglar la FIFA con ustedes. (...) En orden de tener una mejor organización, no puedo hacerlo solo, necesito de todos ustedes, expresó al dirigirse a los representantes de las 209 asociaciones que forman la FIFA, todos con derecho al voto.
Voy a cambiar cosas a partir de mañana, agregó Blatter, de 78 años, tras considerar que la FIFA no se trata solo de un juego ni de asociaciones nacionales, sino, sobre todo, de jugadores, ligas y equipos.
En ese sentido, afirmó que el fútbol profesional necesita más reconocimiento dentro de la organización, y por eso anunció, en caso de ser reelegido, la instauración de un departamento dentro de la FIFA dedicado específicamente a esa área del fútbol.
Blatter, quien durante 17 años ha protagonizado un mandato lleno de decisiones polémicas y diversos escándalos, agregó que el cuerpo directivo del organismo está obligado a luchar no solo contra la corrupción, sino contra otros problemas como el racismo y la violencia.
Por su parte, el príncipe jordano Ali bin Al Hussein expresó que los ojos del mundo están sobre la FIFA, la cual es más que un cuerpo internacional que sirve a los jugadores y miembros de la organización. “Somos guardianes de un juego que tiene el poder de unir”, apuntó.
De acuerdo con el candidato, no podría haber un momento más decisivo para la federación que el actual y la familia de la FIFA reconoce la responsabilidad que tiene con el juego.
Debemos honrar la confianza depositada en nosotros, estaré orgulloso de proteger el fútbol, sus jugadores y seguidores, pero haremos esto juntos. No me esconderé cuando las cosas van mal y saldré cuando vayan bien, asumiré todas las responsabilidades, agregó en alusión a la postura de Blatter tras el escándalo destapado esta semana.
Prometo proteger esta organización con democracia y transparencia, escuchar y abrir las puertas de la FIFA; prometo no actuar unilateralmente, y actuar a través de acciones y no de palabras, combatiré el racismo y la discriminación y restauraré el respeto del mundo por el cuerpo que representamos, apuntó el aspirante de 39 años.
